El café se ha convertido en la principal bebida consumida, después del agua pura, y es la segunda mercancía más comercializada después del petróleo. Esto puede deberse a diversos factores como la practicidad en su preparación, la versatilidad para consumirlo y los múltiples beneficios fisiológicos que brinda a quien lo consume. Por ello,
el café cuenta con un alta demanda a nivel mundial.
A raíz de la pandemia del COVID-19, para el ciclo 2020-2021, en el mundo se consumieron 9.98 millones de toneladas. Esto representa dos millones de sacos más, respecto al periodo anterior. Asimismo, Guatemala pasó de exportar 188,425 toneladas en el 2020 a 225,787 toneladas en el 2022
Para responder a la demanda creciente de café, es importante renovar las plantaciones, mantener la productividad de las parcelas y aumentar la rentabilidad del cultivo.
El panorama mundial del cultivo definitivamente es una ventana de oportunidad para el café guatemalteco.
Manejo del cafeto para la productividad
Para poder mantener parcelas productivas y con rendimientos dentro del promedio, se deben realizar diversas actividades durante el ciclo productivo y después de cada cosecha. Algunas de ellas son la fertilización adecuada, manejo de plagas y enfermedades, podas productivas, manejo de sombra (si aplica) y renovación de plantas, entre otras.
Uno de los factores que determina la productividad del cultivo de café es la edad de la plantación. El cafeto empieza a producir al tercer año después de trasplante y alcanza su pico productivo al quinto año. Al sexto año se recomienda hacer una poda de base o recepa y al décimo año una renovación de plantas. Esta renovación suele trabajarse por lotes dentro de las parcelas, con el objetivo que el productor no incurra en gastos elevados.
Programa de Renovación de Café PRO-INNOVA
Desde el 2018, PRO-INNOVA lanzó este programa con el fin de aumentar la productividad e ingresos de los agricultores. El mismo busca incentivar la renovación de plantaciones de café, a fin de recuperar la productividad de las parcelas y hacerlas más rentables.
Se desarrolla a través de la coinversión entre los caficultores de PRO-INNOVA y Agropecuaria Popoyán; y por cada plántula de café adquirida por un productor, Popoyán otorga una adicional sin costo.
Promoviendo el café del Altiplano Occidental de Guatemala
El café es uno de los productos estrella que atiende PRO-INNOVA. Por la región donde se cultiva (Huehuetenango, Quiché y San Marcos) y las características organolépticas, se identifican como cafés de altura. Este café puede alcanzar punteos de taza de 80 puntos, 84 puntos y hasta más de 85 puntos, convirtiéndolo en café especial.
PRO-INNOVA realiza diversas actividades técnicas, de mercadeo y fortalecimiento con las más de 15 organizaciones que se dedican a la producción de café:
Asistencia técnica especializada de café.
Apoyo en la renovación de plantaciones de café con el programa anual de renovación.
Fortalecimiento administrativo y financiero a las Juntas Directivas de organizaciones y asociaciones de café.
Cofinanciamiento por medio de Pro-Compites y Pro-Mou para mejoras en infraestructura y tecnificación agrícola.
Apoyo en acceso a mercados por medio de agendas especializadas con potenciales socios comerciales.
Es importante que los productores mantengan la calidad de café y su nivel productivo para que se puedan aprovechar escenarios favorables de precios. Por ejemplo, para la cosecha 2022/2023 se percibe un alza en los precios del café a nivel mundial. Esto debido al incremento de la demanda y los problemas que está teniendo Brasil (principal país productor-exportador de café) con su producción.
Para potenciar la comercialización del café y otros cultivos provenientes de productores de pequeña escala, el pasado mes de mayo se lanzó la marca SABORES DE GUATEMALA. Dicha marca busca promover y cambiar la forma en la que se percibe la calidad de los productos del Altiplano Occidental de Guatemala; y conectar de forma directa a las organizaciones de productores con potenciales compradores.